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4 de Marzo de 2025 00:00
De profesión arquitecta, Carolina Pulgarín se especializa en Accesibilidad y tiene un máster en Smart Cities para ciudades inteligentes.
Se desempeña como vicepresidenta del Consejo Euroamericano de Diseño, Ciudad y Construcción Accesible (CIDCCA).
El CIDCCA desarrolla alianzas con entidades como el Fondo Nacional del Turismo (FONTUR) o el Viceministerio de Turismo.
En esta entrevista para Conexión Sabana 360, Pulgarín habla sobre cómo están desarrollando un curso de turismo accesible, tendencia que busca dar la oportunidad a cualquier persona, independientemente de su condición física, social, y demás, para disfrutar de experiencias con calidad, seguridad y autonomía.
¿Cómo funciona el curso de turismo accesible?
Este curso son seis sesiones, dos de manera presencial, cuatro de manera virtual. Las sesiones presenciales van a ser en las capitales de cada uno de los departamentos.
¿Cómo una persona que tenga alguna discapacidad puede acceder a estas sesiones?
Este curso para que cualquier persona que esté interesada en atención incluyente, en lenguaje claro, en comunicación accesible, en lenguaje de señas, en inclusión de género… Y dentro del formulario vamos a preguntar si alguna persona tiene algún tipo de discapacidad. Por ejemplo, si es una persona con discapacidad auditiva, tenemos unas sesiones ya establecidas en lengua de señas.
Porque encontramos diferentes tipos de turismo, como el turismo responsable o el turismo ancestral… ¿por qué ahora se habla de turismo accesible?
Desde la Organización Internacional de Turismo ya se está hablando de turismo accesible desde hace más de 20 años. La accesibilidad en sí viene desde la Primera o Segunda Guerra Mundial, cuando muchas personas adquirían algún tipo de discapacidad precisamente por el conflicto. En un inicio se creía que las personas con discapacidad eran malditos, estaban condenados, eran demonios y los mataban o los ocultaban. Luego se dieron cuenta de que la discapacidad era algo que cualquier persona, independiente de muchas situaciones, podía adquirir. Y es que nosotros no estamos exentos, y si llegamos a adultos mayores, vamos a necesitar de turismo accesible.
En Colombia es un término relativamente nuevo, pero desde el 2013 ya hay una ley que es la Ley Estatutaria 1618, donde se establece que todos los servicios deben ser accesibles para todas las personas. Entonces, hace más o menos 12 años estamos trabajando fuerte con el turismo.
Es usual que la arquitectura de sitios no esté adaptada para personas con discapacidad. ¿Hay iniciativas que estén revirtiendo esta situación?
Medellín lleva trabajando mucho tiempo también en la cultura del Metro y ellos trabajan la accesibilidad, porque la cuestión no es solo física, sino comunicación y actitudinal. Por ejemplo, ellos no se refieren alguien como “una persona minusválida”, porque eso significa que es menos válida o es inválida.
Pero aún falta. Aún no conozco un sitio turístico totalmente accesible en Colombia, donde, por poner un caso, los empleados que saben lengua de señas y podrán recibir a una persona sorda.
Si se implementaran programas de turismo accesible, ¿a cuántas personas realmente beneficiarían?
Al 100% de la población. El 18% de la población mundial tiene algún tipo de discapacidad. Después encontramos a las personas en situación de discapacidad, que es diferente porque son personas que temporalmente sufren de alguna discapacidad, como alguien que se fracturó un brazo o una pierna. Estos son más o menos el 15%. Aquí ya estamos hablando del 33%, y más o menos el 15% de la población también es adulto mayor, entonces ya es casi el 50% de la población.
Se dice que para el 2050 el 22% de la población van a ser adultos mayores porque ya las personas no están teniendo hijos.
El turismo accesible o la accesibilidad es obligatoria o la necesita el 50% de la población, pero resultaría cómoda para el 100%. Si ustedes necesitan gafas y no las llevan puestas, pues no ven nada. Pero si hay una letra grande, podrías leerla. Ese es un ejemplo. Otro caso hipotético: si viajas a China, los pictogramas van a ayudar a cualquiera a acceder a la información.
Muchas veces se relaciona la accesibilidad solo para personas con discapacidad, pero resulta útil para todos.
* Astrid Villa es miembro del Centro de Investigaciones de la Comunicación Corporativa Organizacional (CICCO), adscrito al departamento de Gestión de la Comunicación de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Sabana.
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